¿Qué es la anemia refractaria?



La anemia refractaria es llamada también síndrome mielodisplásico SMD. Se trata de un grupo de enfermedades muy graves que aparecen como resultado de la inadecuada producción de glóbulos rojos del organismo. Tales enfermedades tienden a resistir el tratamiento y a empeorar su pronóstico, aunque esto puede variar entre los pacientes y con los nuevos tratamientos que se han intentado.
Las causas de los SMD no siempre son identificables. Puede ocurrir como resultado de la radiación o quimioterapia en el pasado reciente, que son una versión secundaria de la enfermedad.


La exposición a ciertas sustancias químicas se han relacionado con la anemia refractaria. Las personas con mayor riesgo de padecer este tipo de anemia suelen ser los hombres de raza blanca de 60 años de edad más.
El fracaso para producir adecuadamente los glóbulos rojos por la médula ósea produce un número de síntomas, estos incluyen la fatiga extrema, manchas rojas en la piel llamadas petequias, y la tendencia a enfermar con facilidad. Otros síntomas de la anemia refractaria incluyen un agrandamiento del bazo, la respiración con esfuerzo y la dificultad para mantenerse activo durante un período largo debido al agotamiento.
Los tratamientos utilizados en la mayoría de tipos de anemia como implementar suplementos como el hierro para ayudar a aumentar la producción de células de sangre, son ineficaces en la anemia refractaria ya que estos suplementos de hierro no estimulan la producción medular de células rojas. La única opción para atender las necesidades inmediatas del cuerpo es recurrir a las transfusiones de sangre para abastecer el cuerpo con las células rojas de la sangre que necesita. Sin embargo, en algunos casos, este tratamiento no es suficiente y la tasa de supervivencia comienza a declinar. En los peores casos, como en la anemia refractaria con exceso de blastos en transformación, también llamada leucemia mieloide aguda, la médula ósea no tiene las suficientes células maduras ni plaquetas, por lo tanto, el cuerpo se vuelve cada vez más enfermo, y no hay que muchos tratamientos que prometan una cura total. La cura para esta enfermedad, cuando funciona, es con células madre y quimioterapia.
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Fuente del artículo http://www.articulo.org/9899/juliarangoar

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